Sí, queridos míos, como veis, ayer soplé las velas de mi 39º aniversario. Otro año más coqueteando con el desastre económico, haciendo malabarismos en la cuerda floja y deseando como agua de mayo (o de cualquier otro mes) que llegue 2011. Es éste que llega un año repleto de grandes proyectos y mayores ilusiones. Estamos cerca, muy, muy cerca de conseguir lo que nos merecemos. Yo al menos. Y sé que no soy la única. Sé que hay mucha gente en "lista de espera", aguantando el chaparrón (léase crisis), y esperando que el nuevo año traiga estabilidad y sobre todo: ganas de invertir en nuevos valores y en nuevas novelas.
Mientras tanto, en febrero empezaré Éxodo Negro y La espada de Dios. Una romántica y otra histórica... aparte tengo otros proyectos en el cajón con algunos esquemas y toda la documentación que voy recopilando aquí y allá... Y que se irán haciendo piano, piano.
Una vez más, y a riesgo de repetirme como los ajos o el chorizo, quiero daros las gracias a todos los seguidores del blog, a los visitantes ocasionales o puntuales, a los que andáis pendientes de mis hazañas y logros (y fracasos, ¡cómo no!), a los que me habéis leído ya y a los que tenéis ganas de hacerlo... A todos, MUCHÍSIMAS GRACIAS por dar vida a este blog, por darme vida a mí.