Recupero mi vena periodística y lo hago en compañía de una grandísima autora que aún sólo con 2 libros en el mercado ha cosechado un éxito extraordinario entre las lectoras de novela romántica; una mujer que no teme en absoluto aventurarse en nuevos retos literarios. Me estoy refiriendo a la autora de Decisiones arriesgadas (Terciopelo, 365 pgs), un thriller romántico-erótico que quita el hipo, el sueño y yo qué sé qué más…
Bienvenida a mi blog, Mar, y gracias por acceder a esta entrevista que estoy segura deleitará a todos tus fans, aunque sé bien que no es la primera que concedes después del rutilante estreno de la historia de Megan y Derek.
Muchísimas gracias Julia, para mi es un halago que me des la oportunidad de contestar a tus preguntas y de aparecer en tu blog.
Háblanos de ti. ¿Cómo es Mar como escritora… y cómo es Mar como mujer del siglo XXI? ¿Cuáles son tus inquietudes, anhelos, sueños, preocupaciones…?
Mar escritora y Mar persona se parecen muchísimo en una cosa: ambas somos muy soñadoras y apasionadas. El resto de semejanzas que pueda haber serían meras coincidencias. Mar escritora es osada, es valiente y es aventurera. Le gusta experimentar nuevas emociones y vivir nuevas experiencias a través de sus personajes y de sus historias. Mis novelas me brindan la posibilidad de vivir una especie de maravillosa vida paralela en la que no hay más límites que los que imponen los propios personajes. Mar persona es una chica muy normal con una vida muy normal, con las mismas inquitudes y preocupaciones que cualquier persona de mi edad. Me levanto temprano, voy a trabajar todos los días, pago una hipoteca, tengo pareja estable, una familia estupenda y grandes amistades. Como te comentaba al principio, soy una persona soñadora y apasionada, que no suelo conformarme ni resignarme fácilmente, y supongo que esa parte de mi carácter es el causante de que jamás haya dejado de perseguir mis sueños.
¿De dónde o de quién surgió la idea de Decisiones arriesgadas? O lo que viene a ser lo mismo: ¿cuáles han sido tus fuentes de inspiración?
Siempre me han entusiasmado las novelas de suspense, tuvieran una trama romántica paralela o no (si la tienen, muchísimo mejor). Es el género que más me gusta dentro de la romántica pero a la vez siempre le he tenido mucho respeto como escritora, pues elaborar una trama policíaca que resultara creíble y coherente me parecía de una complejidad que no me veía capacitada para abordar en este momento. Sin embargo, soy una persona muy testaruda y cuando se me mete algo entre ceja y ceja, ya no me lo puedo sacar de la cabeza. Y así es como surgió Decisiones arriesgadas. Escribir esta novela no ha sido un proceso sencillo, todo lo contrario, había momentos en los que tenía ganas de gritar y de dedicarme a otra cosa más sencilla que no me exigiera tanto esfuerzo, pero estaba tan absorbida por los personajes y por la historia, que no me dejaron abandonar. Esta novela ha supuesto todo un reto para mí, y me siento muy orgullosa de ella.
Mis fuentes de inspiración han sido todas esas novelas de misterio y de suspense que he leído a lo largo de los años. Cada vez que leía una me decía: “algún día escribiré la mía propia”. Y ahí está.
Mis fuentes de inspiración han sido todas esas novelas de misterio y de suspense que he leído a lo largo de los años. Cada vez que leía una me decía: “algún día escribiré la mía propia”. Y ahí está.
Ahora que te has adentrado en los terrenos del Thriller, ¿tienes intención de seguir en esta línea narrativa o sólo ha sido un “experimento” puntual?
Por supuesto que tengo la intención de seguir escribiendo más novelas de suspense, de hecho, ya hay un argumento que me da vueltas y más vueltas en la cabeza y que cada día me parece más interesante. La idea es ir intercalando una novela de suspense con otra actual tipo Bajo el cielo de Montana porque tampoco quiero quemarme escribiendo siempre sobre el mismo género. Me gusta explorar nuevas líneas argumentales y ver hasta dónde me llevan y desde luego el suspense está entre mis máximas prioridades.
Ganaste el III premio Terciopelo. ¿Qué ha traído de positivo a tu vida este galardón?
Ganar en III premio Terciopelo ha sido una de las mejores cosas que me han pasado en la vida, y como escritora, indudablemente la mejor de todas. A raíz de este concurso, de la buena acogida que tuvo Bajo el cielo de Montana y de la mejor acogida que está teniendo Decisiones arriesgadas, las puertas de la editorial Terciopelo se han abierto de par en par para mí y cuentan conmigo para seguir publicando con ellos. La verdad es que a veces me parece estar viviendo un sueño del que nunca quisiera despertar.
Tanto Bajo el cielo de Montana como Decisiones arriesgadas están ambientadas en EEUU? ¿Qué pasa con España, no te motiva a escribir?
¡¡¡España es un país maravilloso que no cambiaría por ningún otro!!! Pero cuando se trata de soñar, de fantasear, de imaginar historias y de sumergirme en ese mundo paralelo que te comentaba antes, mi mente viaja muy lejos de aquí. Lo que me empuja a ambientar mis novelas en EEUU no es algo premeditado, es más bien instintivo. Me encanta explorar territorios lejanos, desconocidos para mí, lugares que quizás nunca tenga lo ocasión de visitar… culturas distintas a la mía… es difícil de explicar, pero lo desconocido me resulta exótico y fomenta mucho más mi imaginación. De cualquier forma, yo creo que el país escogido para escribir una novela es lo de menos, lo importante es escribir una buena historia de amor que atrape al lector.
Háblanos de Senderos, sabemos que la estás escribiendo o corrigiendo o… ¿en qué fase estás exactamente?
Estoy en la fase en la que intento desenredar todo lo enredado, jajaja. Me estoy acercando al final de la novela y esta suele ser la parte más complicada para mí, cuando tienes que atar todos los cabos sueltos, hilar muy fino y estar pendiente en todo momento de que no decaiga la acción ni el interés. Espero terminarla para diciembre aunque luego viene el proceso de revisión que siempre es necesario y muy importante. La verdad es que estoy muy entusiasmada con esta novela. Os puedo adelantar que está más en la línea de Bajo el cielo de Montana que de Decisiones arriesgadas, aunque con muchas diferencias, claro.
¿Cuál es tu rutina como escritora? Si acaso sigues alguna… ¿Es fácil compaginarla con otros trabajos?
La verdad es que no tengo ninguna rutina, escribo cuando puedo y tengo un rato libre, ya sea de mañana o de tarde. Hace años escribía por la noche, pero me desvelaba y dejé de hacerlo. En el trabajo, cuando no hay mucha faena y la oficina está tranquilita y en silencio, escribo bastante y por las tardes en casa también. Pero ya te digo, no tengo un horario fijo.
Hablemos de blogs, webs, redes sociales… ¿qué te han aportado durante todos estos años como escritora… y como lectora? Somos muchos los lectores y escritores que pululamos por el ciberespacio a la búsqueda de oportunidades, potenciales clientes, lectores, editores, etc…
Tal y como yo lo veo, el ciberespacio es un mundo abierto de posibilidades, sin el cual, no me puedo ni imaginar cómo haríamos los escritores para informarnos sobre todas las cuestiones que nos interesan y nos afectan (que son muchas). Tampoco podría imaginarme cómo haríamos para darnos publicidad, porque está claro que la existencia de todas las páginas web, foros de romántica, blogs, etc… etc…, están haciendo mucho por la novela romántica y por sus autoras. Yo creo que una de las razones de más peso de la proliferación del género romántico en nuestro país, es la existencia de internet y del gran apoyo que se le brinda en todos los medios que comentaba antes.
Como lectora tampoco sé qué haría yo sin el ciberespacio!! Todo cuanto me interesa lo consulto en internet: novedades, críticas, reseñas, autoras… información para mis novelas… Vamos, que cuanto más lo pienso más segura estoy de que ya no podría vivir sin internet.
Como lectora tampoco sé qué haría yo sin el ciberespacio!! Todo cuanto me interesa lo consulto en internet: novedades, críticas, reseñas, autoras… información para mis novelas… Vamos, que cuanto más lo pienso más segura estoy de que ya no podría vivir sin internet.
¿Cuándo y por qué empezaste a escribir?
Empecé a escribir cuando tenía alrededor de once años, en unas libretitas pequeñas que todavía tengo por ahí guardadas y que no he vuelto a leer porque me moriría de la vergüenza, jaja. Eran historias de aventuras, de terror, de misterio y cosas así, y aunque no eran de romántica propiamente, los protagonistas siempre acababan enamorándose. Ahora me doy cuenta de que la vena romántica la he tenido desde siempre. Empecé a escribir porque desde que tengo uso de razón he disfrutado de una imaginación muy prolífica. Mi cabeza siempre ha estado repleta de ideas, de pensamientos, cargada de sensaciones, conversaciones, personajes, situaciones y tramas a las que necesitaba darles salida. El momento en el que descubrí que podía darle vida a todo eso plasmándolo en un trozo de papel, fue mágico y fascinante y, desde entonces, ya no puedo vivir sin ello. De alguna forma, escribir es una forma de transmitir todo lo que llevamos dentro y de conocernos un poco mejor a nosotros mismos, como casi toda manifestación creativa.
¿Te has formado como escritora… o eres autodidacta?
Soy autodidacta. Todo lo que he aprendido ha sido a base de tesón y empeño. Creo que escribir se compone básicamente de dos ingredientes necesarios e imprescindibles: una buena base gramatical y mucha imaginación. Con lo segundo pienso que se nace, o se tiene imaginación o no se tiene. Pero lo primero se aprende. Además, es un proceso muy largo en el que nunca dejas de aprender, y cuanto más se fuerza la maquinaria, más recursos gramaticales y lingüísticos se adquieren.
¿Cuáles son tus libros de cabecera? Si tienes más de uno…
Si hablamos de novela romántica no podría decirte títulos aunque sí autoras. EL primer lugar del pódium lo ocuparía Sandra Brown, escritora a la que admiro muchísimo tanto en su vertiente romántica como en la de suspense de sus últimos libros. Sus personajes y sus tramas me fascinan. También me gustan mucho Karen Robards, Susan Elizabeth Phillips, Rachel Gibson, Pamela Clare, Karen Rose… casi todas las autoras de actual. También he leído novelas de autoras españolas que me han dejado con la boca abierta y que nada tienen que envidiarle a las extranjeras, aunque no voy a dar nombres por temor a dejarme alguna fuera.
“El género Romántico es de mujeres para mujeres. Yo leo cosas más serias”.
¿Qué dices a esto? ¿Lo asociarías con el machismo o con la (mala) imagen que algunos hombres tienen de las mujeres todavía hoy día?
¿Qué dices a esto? ¿Lo asociarías con el machismo o con la (mala) imagen que algunos hombres tienen de las mujeres todavía hoy día?
Pues digo que es una hipocresía. El amor es un sentimiento universal que sentimos tanto mujeres como hombres. Lo vemos a nuestro alrededor todos los días, en las personas que conocemos y en cualquiera de sus manifestaciones. Por eso no entiendo que el género romántico tenga tan mala imagen entre la mayoría de los hombres (siempre hay excepciones, afortunadamente). Creo que más que una cuestión de machismo o de la mala imagen que puedan tener de las mujeres, a mi me parece que tiene más que ver con la incapacidad que todavía tienen muchos hombres de expresar sus sentimientos abiertamente, como si eso les fuera a hacer más débiles.
¿Cuál es el mejor consejo que se le puede dar a un escritor?
Imagino que te refieres a un escritor que todavía no ha podido ver publicados sus trabajos. Yo le diría que luche por sus sueños, que sea constante y que nunca se venga abajo por muchos rechazos que reciba. A todos nos han cerrado puertas y nos han dicho que no en innumerables ocasiones, pero cuando uno cree en lo que hace y pone en ello su máximo empeño, no puede permitir que nadie ni nada destruya esa ilusión. Yo animo a esas personas a que sigan escribiendo, aprendiendo y mejorando, y seguro que el día menos pensado les llega su oportunidad.
Cada día hay más mujeres escritoras… ¡y con éxito! ¿A qué se debe, según tú?
Creo que se debe a la gran expansión que ha protagonizado la novela romántica en los últimos cuatro años y en la que, internet, gracias a la accesibilidad tan cómoda e inmediata que nos proporciona, ha tenido mucho que ver. La publicidad es indispensable para que un producto se venda, y el ciberespacio ha sido el medio principal de proliferación de la novela romántica. La demanda por parte de los lectores ha originado que las editoriales se pongan las pilas y hayan aprovechado este filón. Por ello, no sólo están publicando a una gran variedad de autoras extranjeras que hace unos años habría sido impensable, sino que también están dando muchas oportunidades a autoras españolas que en nada tienen que envidiar a las extranjeras.
Ahora sólo queda cruzar los dedos y desear que esto no sea una moda pasajera, y que el género romántico sea reconocido en la literatura tal y como se merece.
Ahora sólo queda cruzar los dedos y desear que esto no sea una moda pasajera, y que el género romántico sea reconocido en la literatura tal y como se merece.